La presidenta del tribunal que ha juzgado al exdirigente etarra Francisco Javier García Gaztelu, Txapote, y a su compañera Irantxu Gallastegi, Amaia, por el secuestro y asesinato de Miguel Ángel Blanco ha expulsado de la sala a los familiares y amigos del concejal del PP asesinado que asistían al juicio, tras ovacionar al fiscal y pedir a gritos que se haga justicia.El público presente en la sala, familiares y amigos del edil, han estallado en un gran aplauso cuando el fiscal Miguel Ángel Carballo ha acabado su informe diciendo: "No podemos comprender humanamente la indiferencia de los acusados a no ser que se trate de una artificial pantalla para salvar la cobardía" de enfrentarse a este juicio, que ha quedado hoy visto para sentencia.Al ser expulsadas, la madre y la hermana del concejal han comenzado a insultar a los acusados y a los familiares que se encontraban entre el público, a los que han llamado asesinos, y la hermana, María del Mar, les ha dicho: "Reíros, reíros, que más me voy a reír yo cuando vea a vuestros hijos pudriéndose en la cárcel". Orgullosos del secuestro y asesinatoAntes de entrar a la sala, María del Mar había afirmado que ayer los acusados "demostraron que estaban muy orgullosos del secuestro y asesinato" de su hermano. "Desde luego --ha afirmado-- lo que dejaron muy claro es que era una cosa muy premeditada." "Lo único que nos queda a las víctimas del terrorismo --ha dicho-- es el amparo de la justicia, que se haga justicia, y que los asesinos de nuestros familiares cumplan una condena de muchísimos años. Y si fuera por nuestra parte no volverían a pisar las calles o estos suelos".