El magistrado del Tribunal Supremo Adolfo Prego firmó en el 2007, cuando era vocal del Consejo General del Poder Judicial, a propuesta del Partido Popular, un manifiesto contra la ley de la memoria histórica. El documento fue también avalado por los periodistas Federico Jiménez Losantos y César Vidal.

El manifiesto sostiene que la ley "alcanza extremos de perversión ética y legal" al pretender que "la sociedad recuerde y venere como mártires de la libertad a muchos de los peores criminales que ensombrecen nuestra historia".