El fiscal jefe de Cataluña, Martín Rodríguez-Sol, ha puesto hoy su cargo a disposición del fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, que lo había expedientado para destituirle por opinar sobre la consulta soberanista catalana.

A su salida de la Fiscalía General del Estado, Rodríguez-Sol ha asegurado que Torres-Dulce ha aceptado su renuncia, que se producirá en los próximos días.