El juicio al expresidente de Baleares Jaume Matas por su presunta implicación en el llamado caso Palma Arena amenaza con superar todos los registros existentes en la prolífica historia de la corrupción política en el archipiélago. Después de que Matas declarara entre el miércoles y el jueves en los juzgados de Palma durante casi 15 horas, la fiscalía pidió ayer al juez instructor que imponga al expresidente autonómico y exministro --fue titular de Medio Ambiente a las órdenes de José María Aznar-- una fianza de tres millones de euros, a fin de eludir la prisión. Se trata de la suma más alta jamás solicitada por un caso de corrupción en la historia de Baleares. El ministerio público atribuye a Matas una docena de delitos que, sumados, acarrean penas de hasta 24 años de cárcel. Entre ellos, haber ordenado el pago de desvíos presupuestarios de más de 41 millones de euros en las obras de construcción del velódromo de Palma.

En el curso de la vistilla de medidas cautelares, celebrada ayer por la mañana, los fiscales anticorrupción Pedro Horrach y Juan Carrau solicitaron además que se le retire el pasaporte al expresidente y exministro --Matas reside en EEUU--, que se le prohíba salir de España y que se le obligue a presentarse en comisaría cada 15 días. El instructor del caso Palma Arena, José Castro, se pronunciará sobre la petición de prisión eludible con fianza el lunes a las diez de la mañana, aunque decretó casi de inmediato la retirada del pasaporte.

MALVERSACION Y COHECHO En un escrito de 60 folios, la fiscalía imputa a Matas delitos de malversación de caudales públicos, falsedad documental, prevaricación administrativa, cohecho, fraude a la administración y blanqueo de capitales, así como un delito electoral. La suma de los cargos conllevaría una condena de más de 24 años de prisión, con un límite máximo de cumplimiento de 18 años, según precisaron fuentes jurídicas. La fiscalía apunta que parte del dinero generado con el sobrecoste del velódromo sirvió para pagar gastos electorales del PP.

Además, entre los delitos que el escrito de los fiscales atribuye a Matas figura uno de cohecho por haber recibido un presunto soborno de 250.000 euros de manos del empresario y presentador José Luis Moreno. El pago se produjo, según la fiscalía, en contraprestación "por las adjudicaciones de programas y decorados" que el órgano de contratación de IB3, la televisión pública de Baleares, hizo a empresas mercantiles vinculadas a Moreno. El empresario atribuyó ayer esta acusación a una "invención de mala fe" de un exempleado.

Mientras, los socialistas entraron en tromba ayer a reclamar al líder de los conservadores, Mariano Rajoy, que dé explicaciones "detalladas y convincentes" sobre el comportamiento político de Matas y el apoyo, o no, del PP a ese exdirigente.