El teniente fiscal de la Audiencia Nacional Jesús Santos solicitó ayer 103 años de prisión y una orden de alejamiento de cinco años respecto de los familiares de sus víctimas para el presunto etarra Diego López de Arkaute por el asesinato del portavoz socialista Fernando Buesa y su escolta, Jorge Díez, el 22 de febrero del 2000. Es la primera vez que se reclama esta medida para un acusado de terrorismo.