Los etarras Igor Portu, Mattin Sarasola y Mikel San Sebastian, ya condenados a 1.040 años por el atentado de la T-4, serán juzgados esta semana junto a Joseba Iturbide por intentar atentar en la zona comercial de AZCA en Madrid, hechos por los que la Fiscalía pedirá entre 30 y 33 años de prisión. En el juicio que se celebrará los próximos martes y miércoles en la Audiencia Nacional, el fiscal acusará a los cuatro miembros del comando "Elurra" de los delitos de pertenencia a banda terrorista, conspiración para la realización de estragos terroristas y tenencia o depósito de sustancias o aparatos explosivos, y a Portu y Sarasola les añadirá el de tenencia ilícita de armas.

Según el representante del Ministerio Público, para perpetrar el atentado en AZCA, Portu alquiló en Irún (Guipúzcoa) un coche, modelo Kia Picanto, con el que los procesados se desplazaron a Madrid vía Zaragoza en los primeros días de diciembre de 2007 con el fin de "mirar el sitio donde colocar un vehículo-bomba". A las 13:26 horas del 1 de diciembre, accedieron al aparcamiento del ente público ADIF situado en la confluencia del Paseo de la Castellana con la calle de Raimundo Fernández Villaverde. El punto elegido para colocar el vehículo era el aparcamiento existente entre el edificio de El Corte Inglés y el BBVA, pero lo impidió la detención de Portu y Sarasola el 6 de enero de 2008 en la zona de Udala próxima a Mondragón (Guipúzcoa).

En el momento de su detención, Portu y Sarasola portaban dos revólveres de los robados por ETA de la empresa SIDAM, en Vauvert (Francia), el 23 de octubre de 2006. Según el fiscal, en 2002 Joseba Aranibar -que fue detenido en Francia en julio de 2007- instó a Sarasola a que encontrara una o dos personas para que le ayudaran a trasladar personas vinculadas a ETA. Con Iturbide y Portu formó el comando "Goiztiarrak", encargado de trasladar miembros liberados de la banda desde un punto cercano a la frontera navarra entre España y Francia hasta diferentes puntos del País Vasco, cosa que hicieron en al menos cuatro ocasiones.

Más tarde, a principios de 2004, Aranibar propuso a Sarasola llevar material y captar a un cuarto miembro, Mikel San Sebastian, con el que se constituyó el comando "Elurra", cuya función era desplazar explosivos a diferentes puntos de España. De esta forma, entre julio de 2004 y mediados de 2006, el comando realizó diversos traslados de material y construyó al menos dos zulos en Lesaka y Nocito (Huesca) en los que guardaban explosivos.

Por otra parte, la Audiencia Nacional juzgará desde el martes a Amets Ladislao González, Javier Gutiérrez, Ibai Egurrola, Mercedes Alcocer y María Isabel Prieto, acusados de alojar y ayudar a cruzar la frontera hacia Francia a finales de 2008 a los etarras Asier Borrero y Aitor Arretxe, hechos por los que la Fiscalía pide para ellos penas de entre 5 y 7 años de prisión. Este mismo tribunal juzgará el lunes a Borja Oregi Urrutia, acusado de participar el 25 de mayo de 2007 en un ataque con artefactos incendiarios a una subestación de Telefónica en Markina Xemein (Vizcaya), hechos por los que el Ministerio Público pide para él cuatro años y medio de prisión.