La fiscalía anticorrupción reiteró ayer al juez Baltasar Garzón que los indicios que ha encontrado contra el senador y tesorero del PP Luis Bárcenas y el eurodiputado Gerardo Galeote son insuficientes para elevar la causa de la trama corrupta vinculada al partido que dirige Mariano Rajoy al Tribunal Supremo.

Además, la fiscalía sostiene que el tribunal competente para actuar contra los aforados del PP es el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), que asumirá la investigación en cuanto la Comunidad de Madrid certifique la condición de parlamentarios autonómicos de Alberto López Viejo, Benjamín Martín Vasco y Alfonso Bosch.

Fuentes fiscales han explicado que Garzón sólo puede practicar las diligencias urgentes para esclarecer el delito, pero que no puede intervenir ante el alto tribunal, ya que ha remitido la causa al Tribunal Superior de Justicia de Madrid. Esta sede, en su opinión, es la única que debe acudir al alto tribunal. Por ello, apoyan que el juez de la Audiencia realice un informe sobre los indicios contra Bárcenas y Galeote y que los envíe al TSJM. Estas mismas fuentes dicen que las pruebas contra el senador del PP demuestran un enriquecimiento ilícito y no una financiación ilegal del partido.

Asimismo, la fiscalía sostiene que la investigación se debe centrar en averiguar el dinero que Francisco Correa evadió a paraísos fiscales. También quieren apuntalar el dinero que esta trama ha podido lograr de las adjudicaciones durante los años en que los que gobernó el partido José María Aznar. Por ahora, las fuentes consultadas subrayan que no hay datos que acrediten que el partido se haya lucrado con estos negocios irregulares. Las mismas fuentes han adelantado que el caso acabará en el Supremo. A su juicio, se debe aplicar la doctrina establecida cuando se investigó a la mesa nacional de Batasuna.