El fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, ha asegurado este martes que los fiscales no tienen ninguna intención de "ralentizar ni acelerar absolutamente nada" en relación a la sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos que anula la aplicación de la doctrina Parot. Torres-Dulce ha recordado que España es un estado de derecho sujeto a los tratados internacionales que debe acatar con respeto. "Aunque discrepemos", ha añadido. Sobre el papel que adoptarán los fiscales ante los recursos que ya han empezado a presentar los presos a los que podría afectar el fallo, ha explicado que los casos se estudiarán de manera individualizada y que cada fiscal elaborará un informe pormenorizado, porque el fallo no condicionará a todos los casos por igual.

El fiscal general del Estado ha insistido, en transcurso de un desayuno informativo organizado por Nueva Economía Fórum en el hotel Ritz de Madrid, en que la sentencia de Estrasburgo "no cuestiona la doctrina Parot, sino su aplicación retroactiva en algunos casos". Y ha negado que la decisión de los jueces europeos suponga un fracaso para España.

La Fiscalía de la Audiencia Nacional ha apoyado este martes la excarcelación de la etarra Inés del Río al considerar que la sentencia del tribunal de Estrasburgo es "clara a la hora de indicar la medida requerida para poner remedio al derecho o derechos vulnerados". El fiscal ha reclamado que se la ponga en libertad en el plazo más breve posible, ya que entiende que la sentencia no da "ninguna elección", han informado fuentes jurídicas.

Cuestiones del Gobierno

En su comparecencia ante los medios de comunicación, Torres-Dulce no ha querido entrar en cuestiones como su posición ante una nueva política penitenciaria de acercamiento de presos de ETA o el reto soberanista en Catalunya. "De la misma manera que yo defiendo la independencia y autonomía de mi institución, no me corresponde a mi entrar en las cuestiones que solo corresponden al Gobierno de la nación".