El PP y el PSOE, con el apoyo de los nacionalistas canarios y de los andalucistas, rechazaron ayer en el Congreso las enmiendas a la totalidad de la ley para el cumplimiento íntegro de las condenas por terrorismo, que incrementa las penas máximas de 30 a 40 años. Las enmiendas habían sido presentadas por IU, el PNV y cuatro partidos del Grupo Mixto (ERC, ICV, BNG y EA). Por su parte, CiU, que discrepa del trato que el proyecto de ley concede a la reinserción, decidió abstenerse.

Los grupos que defendían la retirada del proyecto descalificaron la reforma acordada entre populares y socialistas por ser inconstitucional. Estimaron que atenta contra la seguridad jurídica de las personas, la irretroactividad de las leyes, la dignidad humana y la resocialización de los presos.

Luis Carlos Rejón, de IU, añadió que la reforma también cuestiona los pactos internacionales sobre derechos humanos firmados por España. Según Rejón, "es tal el anacronismo de este proyecto que hasta infringe el recientemente aprobado Estatuto de la Corte Penal Internacional, ratificado por España, en el que se coloca el límite máximo de 30 años de pena efectiva para los más abyectos crímenes imaginables por la humanidad".