El candidato del PP a la Xunta de Galicia, Manuel Fraga, mostró ayer en un foro de internet su "apoyo y reconocimiento personal" a las distintas instituciones que impulsan la manifestación contra el matrimonio gay. Aunque la movilización se celebra el sábado, jornada de reflexión en Galicia, el líder popular opinó que no tendrá influencia sobre la elecciones gallegas. Su explicación: "Porque no tendrá lugar en tierras gallegas".

Fraga no ha podido librarse del fantasma de la división dentro del PP gallego, por mucho que tratase de evitarlo en la campaña. Ayer mismo volvió a asegurar que su partido está "tan unido que ya lo quisieran los demás". Pero lo cierto es que tuvo que reinterpretar las palabras del exconsejero popular Xosé Cuiña, quien en un mitin en Lalín reclamó su derecho a concurrir a la sucesión de Fraga y explicó que prefería "morir como un gladiador en la arena que en las gradas de la pasividad".

NERVIOS EN EL PLATO En los momentos previos a una entrevista en los estudios de Antena 3 en Galicia, Alfonso Cabaleiro, secretario de relaciones con los medios informativos, hizo a Fraga una observación sobre su chaqueta. En tono irritado, el presidente exclamó: "¡Quiere usted hacerme el puñetero favor de largarse de aquí!". ... "¡Tóqueme usted las narices...".

Por su parte, Emilio Pérez Touriño, candidato del PSG, se refirió anoche directamente a la jornada electoral del 14 de marzo del 2004 y pidió a quienes retiraron entonces al PP de José María Aznar del poder que "abran ahora las puertas del cambio en Galicia". También se dirigió a los votantes de Fraga para solicitarles que "hagan lo mismo y que reflexionen" sobre quién les ofrece ahora más futuro.