Francia expulsó ayer a Iñaki de Gracia, Iñaki de Rentería, exnúmero uno de ETA, tras cumplir 10 años de cárcel por asociación de malhechores. La policía francesa le recogió en la cárcel y lo condujo hasta el puesto fronterizo de Canfranc (Huesca). Los agentes españoles lo detuvieron ya que la Audiencia Nacional tiene dictadas varias órdenes de prisión. Hoy será puesto a disposición judicial.

La fiscalía de la Audiencia comenzó ayer a revisar los sumarios en los que está imputado el exjefe etarra, detenido en Francia en el 2000. Estas fuentes han adelantado que, al menos, tiene dos causas pendientes por hechos antiguos. Por ello, deberán revisar si los delitos han prescrito o siguen vigentes. La justicia francesa le condenó a 5 años de cárcel tres meses después de su detención. Sin embargo, en el 2003 duplicó la pena.

En Francia, los internos no cumplen íntegramente las condenas, pero no se les permite residir en este país si su estancia es ilegal. Simultáneamente, un juez francés ordenó el ingreso en prisión provisional de Ugaitz Astiz y Joseba Mikel Olza, presuntos etarras detenidos el miércoles pasado en el sur de Francia, que iban en bicicleta y armados con pistolas.