Yusuf Galán se presentó ayer, a preguntas de su defensora, como un "humanista" al que le gusta "disparar y hacer ruido", pero negó ser un terrorista. Y aseguró que él estaba "en otra onda".

Este imputado negó haber viajado a Indonesia para recibir un cursillo de entrenamiento en un campo dirigido por Osama bin Laden, de lo que le acusa el fiscal Pedro Rubira. Y negó haber hecho la bayat (juramento a un emir para la yihad).

A preguntas del presidente del tribunal, Javier Gómez Bermúdez, se negó a opinar sobre ETA. Galán fue interventor de Herri Batasuna (HB) en 1989.