El diputado general de Guipúzcoa, Martin Garitano, representante de Bildu, ha reclamado la derogación de la doctrina Parot, que supone "la cadena perpetua" para los presos de ETA, el fin de la dispersión y la legalización de Sortu. En la recepción de autoridades con motivo de las fiestas de San Ignacio en la localidad guipuzcoana de Azpeitia, Garitano ha afirmado que la sociedad vasca "está viviendo un ciclo político nuevo" y ha llamado la atención sobre la situación que "atraviesan los presos políticos vascos". Por ello, ha recordado que la Diputación de Guipúzcoa pide "la inmediata" derogación de la doctrina Parot, que es "la cadena perpetua", además del fin de la dispersión, la puesta en libertad de los presos enfermos y de los que estén "en condiciones de alcanzar la libertad condicional". Además, ha destacado que "hay un sector político importante, que sigue ilegalizado" y ha emplazado a poner fin a esa ilegalización. El máximo representante de la institución foral ha realizado estas declaraciones antes de la misa celebrada en la basílica de San Ignacio de Loiola, en Azpeitia (Guipúzcoa), a la que no asistió, aunque sí estuvo presente en la recepción de las autoridades en el ayuntamiento, al que también acudieron la presidenta de las Juntas Generales de Guipúzcoa, Lohitzune Txarola, la consejera de Educación del Gobierno vasco, Isabel Celáa, y el alcalde de Azpeitia, Eneko Etxeberria, de Bildu. Tras las declaraciones, Garitano se ha acercado a las varias decenas de personas pertenecientes de la asociación de familiares de presos a ETA, Etxerat, que se encontraban concentrados a favor del traslado de los reclusos del País Vasco, y les ha saludado. Mientras, el obispo donostiarra, Jose Ignacio Munilla, en la homilía, ha pedido a ETA que exprese su "arrepentimiento" y ha pedido que se inicie la vía hacia una auténtica "reconciliación".