El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón ha dejado en libertad bajo fianza de 30.000 euros al exsecretario general del sindicato LAB Rafael Díez Usabiaga, en prisión desde octubre por intentar reconstituir la ilegal Batasuna.

La decisión de Garzón responde a la petición de Díez Usabiaga para poder asistir a su madre, que le reclamó como "cuidador" acogiéndose a la ley sobre la dependencia.

Díez Usabiaga, que está acusado de un delito de integración en organización terrorista, podrá abandonar la prisión de Estremera (Madrid) en la que se encuentra desde el 16 de octubre, con la condición de enviar al juez cada 15 días "información sobre el desarrollo del cuidado dispensado a su madre, de él dependiente".

PASAPORTE RETIRADO

En un auto dictado hoy, el magistrado también impone a Díez Usabiaga la prohibición de salir del territorio nacional y dos comparecencias judiciales por semana en el juzgado más próximo a su domicilio, así como la retirada del pasaporte.

Usabiaga está procesado junto al exportavoz de Batasuna Arnaldo Otegi y otras seis personas por un delito de integración en organización terrorista por su intervención en un proyecto que, según Garzón, trataba de reconstruir la marca electoral de ETA para concurrir a las elecciones municipales y forales del 2011.

OCHO PROCESADOS EN LA OPERACIÓN

Además de Otegi y Usabiaga, Garzón procesó el pasado 25 de enero a la extesorera del Partido Comunista de las Tierras Vascas (PCTV) Sonia Jacinto; Miren Zabaleta, hija del líder de Aralar Patxi Zabaleta y una de las dirigentes emergentes de la izquierda aberzale; y Arkaitz Rodríguez, exresponsable de Haika en Álava, así como a José Luis Moreno Sagües, José Manuel Serra Ugarte y Amaia Esnal, a quienes impuso una fianza de 10.000 euros.

Todos los procesados fueron detenidos el pasado 13 de octubre, igual que Ainara Oiz y Rufi Etxeberria, histórico miembro de la Mesa Nacional de Batasuna, que quedaron en libertad sin ninguna medida cautelar.