El Gobierno está "consternado" ante la "ligereza" con la que Alemania está tratando la crisis del pepino y cree que el Ejecutivo alemán ha buscado "desesperadamente" culpables, según el secretario de Estado de Medio Rural y Agua, Josep Puxeu. También el presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, ha subrayado que la crisis causada tras la alerta por una infección bacteriana en Alemania debe ser compensada y ha opinado que ese país debe asumir su responsabilidad y no puede hacer "lo que le dé la gana". "Ahí ha habido una improvisación que ahora están pagando lo países exportadores", ha remarcado el dirigente español, que ha reconocido que tanto él como su equipo están siendo "muy duros" con los alemanes. Puxeu, en declaraciones a RNE, ha pedido respeto para la crisis sanitaria alemana, aunque ha reclamado que no se puede poner en duda la gestión alimentaria de Europa. "Me remito a los hechos. Si los responsables de salud de Hamburgo hacen un muestreo de muchos productos, pero buscan cuatro pepinos de cuatro procedencias y son capaces de ver la trazabilidad, eso define el rigor de la cadena alimentaria", ha subrayado. Respecto al cierre del mercado ruso, el secretario de Estado ha reconocido que este tipo de medidas hacen daño al sector, pero ha apuntado que no se puede responsabilizar a un país de "un caso indocumentado", por lo que ha pedido que se disipen las dudas mediante evidencias. 18.000 millones de euros En relación a los agricultores del sur de España, Puxeu ha reconocido que es necesario recuperar la confianza, a la vez que ha alabado el trabajo de "los hombres y mujeres del sur", quienes facturan 18.000 millones de euros anuales en frutas y hortalizas, motivo por el que ha calificado al sector de "la joya de la corona". Asimismo, ha asegurado que lo primordial ahora es lavar la imagen del sector mediante seguridad y pedagogía del sector, puesto que comienza la temporada de primavera, una época de "gran consumo". Por último, ha reconocido que este tipo de bacteria E. coli es una cepa "rara" y ha señalado que incluso los sanitarios españoles han tenido problemas para encontrar elementos de contraste. Acusaciones de prepotencia Griñán ha subrayado que se trata de una crisis que está haciendo un daño "tremendo" y que le preocupa que desde la llegada de Angela Merkel se están tomando muchas decisiones o haciendo cosas que prescinden "del nosotros" en la UE y que "el más fuerte puede tener la capacidad de hacer lo que le dé la gana sin incluirse en la Unión". "Alemania tiene que reflexionar y darse cuenta de que será el país más fuerte en la UE, pero no puede hacer lo que le dé la gana", ha opinado el presidente andaluz. Griñán ha destacado que alguien ha despertado una alerta "innecesaria, indebida, improcedente e inadecuada" haciendo una daño enorme a un país "sin comprobar lo que decía y vulnerando las leyes de la UE", por lo que se "puede y se debe compensar". "Es verdad que Alemania es la que más financia, pero debe asumir su responsabilidad por despertar una alarma no fundamentada", ha dicho Griñán, quien ha subrayado que la máxima prioridad debe ser la seguridad y en ese punto los productos andaluces "han pasado todos los controles sanitarios". En segundo lugar ha destacado la "indignación" con la que se vive esta situación en Andalucía, que elevará las "protestas correspondientes", y ha alentado a "estar atento a determinar cuál es el foco, para saber cuándo y dónde se ha producido".
