Las fuerzas del tripartito se conjuraron ayer para ofrecer una imagen de unidad después de la última tormenta. El PSC, ERC e ICV-EUiA proclamaron la "estabilidad, la cohesión y la solidez" del Gobierno catalán y aseguraron que "errores personales" como el de Carod-Rovira ni "ofensivas" como la del PP pondrán en jaque la estabilidad del tripartito.

Minutos después de que Josep Lluís Carod-Rovira comunicara públicamente su renuncia a recuperar el cargo de conseller en cap, las fuerzas del tripartito se reunieron para analizar la crisis política desatada y redactar un comunicado donde quede claro que Cataluña "no da ni dará tregua a la violencia terrorista, ni olvidará" a todas las víctimas.

El tripartito condenó el intento del PP de utilizar el comunicado de ETA y la lucha antiterrorista "para dividir a los demócratas" por "una motivación electoralista".