El Consejo de Ministros ha aprobado el Plan Nacional de Inclusión Social 2014-2017, destinado a combatir la pobreza, especialmente la infantil, contará con un presupuesto global que supera los 135.000 millones de euros, en parte provenientes de los fondos que se recaudan mediante la casilla de Fines Sociales en la declaración de la renta. En ella están implicados ocho ministerios, las comunidades autónomas y los ayuntamientos, y será coordinada por el de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, según ha explicado su titular, Ana Mato.

El plan, que llega con dos años de retraso, consta de 240 medidas dirigidas a personas sin hogar, discapacitados, mayores, inmigrantes sin papeles, parados sin prestación o subsidio de desempleo, víctimas de violencia de género y niños menores de 14 años. Con ellas, según la ministra, se tratará de cumplir la recomendación de la Comisión Europea de reducir la pobreza en España entre 1,4 y 1,5 millones de personas desde el año 2009 al 2019.

Plan ambicioso

Entre las partidas concretas, según Mato, figuran un fondo extraordinario de 17 millones de euros para combatir la pobreza infantil. "Es el plan más ambicioso porque se ha elaborado con el consenso de todas las administraciones", ha asegurado la ministra. También se incorpora un plan de urgencia social dotado con 20 millones de euros para atender a familias en situación de extrema necesidad "sobre todo si tienen hijos menores".

Nivel de pobreza alto

Un informe de Unicef 2012-2013 señala que el 13,7% de los menores de 18 viven en hogares con un nivel "de pobreza alto". Se trata de familias con dos niños menores de 14 años y con ingresos inferiores a 10.983 euros. Es la cifra más elevada de toda la UE si se exceptúa Rumanía y Bulgaria. La última encuesta de condiciones de vida del INE afirma que una de cada cinco personas vive en España por debajo de la pobreza y el último informe de Cáritas cifra en más de tres millones los españoles que viven en una situación de pobreza extrema.