El Gobierno pide discreción sobre el caso de los secuestrados por Al Qaeda en Mauritania. La secretaria de Estado de Cooperación, Soraya Rodríguez, que acompañó el miércoles a la cooperante liberada Alicia Gámez en su viaje de regreso a España, reclamó ayer "prudencia informativa" para "no poner en riesgo" la seguridad de Roque Pascual y Albert Vilalta, que siguen en cautiverio. "Sigue siendo necesario, porque Alicia durmió ayer en su cama, pero Albert y Roque siguen secuestrados", insistió.

La responsable de Cooperación advirtió, en declaraciones a RNE, de que no es momento de desvelar detalles de la investigación: "No es bueno para seguir trabajando como lo estamos haciendo para que Albert y Roque sean liberados, lo único que ahora mismo nos importa". En consonancia con la prudencia que reclamó, no quiso especular sobre la posible vuelta a casa de Vilalta y Pascual: "No podemos dar una fecha, sería una irresponsabilidad por nuestra parte". La secretaria de Estado de Cooperación subrayó que el Gobierno no pagó un rescate por la liberación de Gámez y explicó que el regreso con ella fue "un viaje muy bonito" en el que le contó cómo se había movilizado la sociedad en favor de los secuestrados.

Un día después de su regreso, y tras dormir en su casa por primera vez en tres meses, Gámez salió ayer para pasar un reconocimiento médico, pero optó por descansar y no visitó el juzgado de instrucción en el que trabaja.