Una vez que parece inminente la convocatoria de elecciones por parte de Carles Puigdemont, el Gobierno central se inclina, en estos momentos, por terminar la tramitación del 155 de la Constitución en el Senado y sopesar después si lo aplica o no y con qué ritmo dependiendo del alcance de la posición final que alcance la Generalitat, confirmaron a este diario fuentes de la dirección popular.

Según estas fuentes, la confianza sobre los anuncios que llegan desde el Govern es "mínima", dados los acontecimientos que se han vivido en las últimas semanas y, por tanto, la postura del Estado dependerá de si se "vuelve a la legalidad" en Catalunya o no. Insisten en que s estas alturas no se van a apresurar a responder hasta conocer los hechos con detalle: Puigdemont ha convocado una comparecencia a las 13.30 horas.

El eventual paso de Puigdemont aceptando convocar elecciones es el resultado del proceso de mediación que está llevando a cabo el lehendakari, Iñigo Urkullu, con la participación de un grupo de empresarios catalanes, entre otros, Juan José López Burniol, Marian Puig, Emilio Cuatrecasas y Joaquim Coello, según informa Fidel Masreal.

Sobre la posibilidad de que el 'president' convoque elecciones formalmente antes de que el 155 sea una realidad en el Senado (momento que llegará el viernes) y publicado en el Boletín Oficial del Estado, desde la cúpula del PP se admite que esos comicios seguirían adelante y serían los que se celebrarían. El paquete de medidas del 155 incluye la posibilidad de que Mariano Rajoy pueda convocar comicios autonómicos.