Tras la primera reunión del Consejo de Ministros de José Luis Rodríguez Zapatero, la vicepresidenta Teresa Fernández de la Vega garantizó ayer que, en su función de ministra portavoz, no aprovechará la plataforma de la Moncloa para atacar a la oposición. "Esta es la Mesa del Consejo de Ministros de todos los españoles, y no se utilizará para descalificar a la oposición", prometió la portavoz.

La primera reunión de este Consejo de Ministros, de carácter extraordinario, tenía 3 puntos en el orden del día: la retirada militar de Irak, el cambio de estructura del Gobierno y la convocatoria de las elecciones europeas. Por eso, tras 2 horas de deliberaciones, Fernández de la Vega compareció junto a los titulares de Defensa, José Bono, y Asuntos Exteriores y Cooperación, Miguel Angel Moratinos.

"HONESTA Y EFECTIVA" Pero la vicepresidenta aprovechó también para adelantar cómo ejercerá el cargo de portavoz gubernamental que, tal como anunció este diario el 1 de abril, le ha encomendado Zapatero. "Seré una portavoz honesta, efectiva y estoica cuando las críticas lleguen, que estoy segura que algún día llegarán", garantizó.

El Consejo acordó algunos nombramientos y numerosos ceses. Entre ellos, los del fiscal general del Estado, Jesús Cardenal, y el director del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Jorge Dezcallar, cuestionado por el papel de los servicios de inteligencia antes y después del atentado del 11-M en Madrid.