Ante lo que sucedió el domingo en San Sebastián, el Departamento de Interior vasco decidió ayer prohibir las concentraciones anunciadas para hoy a favor del etarra Jon Anza, fallecido en Francia, en previsión de la comisión de delitos de enaltecimiento del terrorismo o alteración del orden público.

La consejería de Rodolfo Ares ha valorado "el carácter delictivo de la convocatoria, en la cual se denuncia la muerte del miembro de ETA a manos de las fuerzas de seguridad españolas". Pese al veto, el Movimiento Pro Amnistía mantuvo su llamamiento y acusó al Estado y a la prensa de intentar "limpiar la guerra sucia", presentando el fallecimiento de Anza como una muerte natural.