Como un éxito de la diplomacia española describió ayer el Gobierno el consenso forjado en la ONU en torno a la resolución sobre Irak auspiciada por EEUU y el Reino Unido, los países ocupantes. De hecho, el ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, Miguel Angel Moratinos, diagnosticó que el anunciado acuerdo del Consejo de Seguridad es consecuencia de la retirada de España de Irak, que definió como un "detonante" para forzar, en un futuro, el fin de la ocupación militar.

Sin esperar a que llovieran las previsibles críticas de la oposición, ayer el Gobierno se esforzó en aclarar que esa recuperación del consenso de la ONU sobre Irak, roto en vísperas de la guerra, no sólo no cuestiona la decisión de José Luis Rodríguez Zapatero de repatriar a las tropas españolas allí desplegadas, sino que "la confirma plenamente".

Recordó Moratinos que, durante la campaña de las elecciones generales, Zapatero condicionó el mantenimiento de los soldados en Irak a que la ONU asumiera el control "político y militar" del país antes del 30 de junio. Demanda que, subrayó, la nueva resolución del Consejo de Seguridad no satisface, aunque España la respalde "en aras del consenso y del papel multilateral de las Naciones Unidas".

EL CALENDARIO El 18 de abril, al llegar a la Moncloa, el presidente precipitó la retirada convencido de que la ONU no aprobaría una resolución de este tipo en el plazo que había fijado en campaña. Acertó en el contenido, pero no en el calendario. Aun así, ayer el titular de Exteriores aseguró que, pese a esta resolución, el Gobierno volvería a ordenar la repatriación de las tropas si no lo hubiese hecho ya.

"La decisión del Gobierno era la acertada. Nos hemos adelantado en el tiempo", dijo Moratinos para desmentir que el acuerdo de Washington y Londres con el eje franco-alemán condene a España al "aislamiento" en la ONU. Recordó que sólo tres de los 15 países del Consejo de Seguridad --EEUU, Reino Unido y Rumanía-- tienen tropas en Irak, y que Francia y Alemania, como España, descartan enviarlas.

Sin ocultar que Zapatero hubiera preferido otra resolución, Moratinos sostuvo que han sido EEUU y Gran Bretaña "los que se han acercado a la visión política de Francia, Alemania y España, y no viceversa".

Además, Moratinos desgranó las aportaciones que España ha introducido en la resolución como la exigencia de que las fuerzas multinacionales respeten los derechos humanos y salgan de Irak "lo más rápido posible".