El debate parlamentario sobre el proyecto soberanista del lendakari Ibarretxe no se detendrá aunque el Tribunal Constitucional admita a trámite la impugnación presentada por el Gobierno de José María Aznar. Este es el mensaje que transmitieron ayer el Gobierno vasco y los tres partidos que lo sustentan (PNV, EA e IU).

El consejero de Justicia vasco, Joseba Azkarraga (EA), reiteró su "confianza" en que el Constitucional rechace la impugnación porque es una "barbaridad". Azkarraga se remitió a las opiniones de "expertos" en Derecho Constitucional, que consideran inviable recurrir ante los jueces lo que sólo es una propuesta parlamentaria. Y señaló que la voluntad del Gobierno vasco es "acatar" las resoluciones judiciales, "criticarlas cuando haya que criticarlas y debatir".

Aunque el Ejecutivo que preside Ibarretxe se niega a admitir en público que el Tribunal Constitucional puede admitir el recurso, lo cierto es que ya está estudiando cómo actuar si eso ocurre. Los tres partidos que integran el Gabinete de Vitoria no descartan entonces remitir el proyecto al Parlamento vasco como proposición de ley para reformar el actual Estatuto de Euskadi.

El lendakari defendió ayer su plan para hacer de Euskadi una "nación libre asociada" a España con el argumento de que el País Vasco reclama "capacidad de responder" a situaciones como la provocada por el hundimiento del Prestige . "Para eso es el autogobierno --insistió--, no es para pelearnos con los de Madrid".