La Guardia Civil ha localizado esta mañana un vehículo cargado con casi cien kilos de explosivos y detonadores abandonado a las afueras de la localidad onubense de Ayamonte e investiga su posible relación con la banda terrorista ETA, informaron a Efe fuentes de la lucha antiterrorista.

El material explosivo hallado en el coche estaba en bolsas separadas y no había ningún dispositivo de iniciación activado, informaron a Efe fuentes de la investigación. Este dato confirma que el vehículo, que se encontraba estacionado en un desvío de la autovía A-49, a unos dos kilómetros de la frontera portuguesa, era un transporte de explosivos -se calcula que llevaba unos cien kilos de este material- y que no estaba preparado para servir como coche-bomba

Fue la llamada de un vecino que vio el coche abandonado y sin nadie en su interior la que alertó a la Guardia Civil, que envió al lugar a una patrulla cuyos integrantes avisaron a los TEDAX al observar varias bolsas sospechosas en el interior del automóvil. Las fuentes consultadas creen que el vehículo, un Ford Focus familiar, había entrado en España desde Portugal -llevaba placas de matrícula falsificadas de este país-, aunque la inexistencia de controles aduaneros en la frontera entre ambos Estados no ha permitido confirmarlo aún.