EL PRESIDENTE de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, declaró ayer que era "posible" que supiera algo sobre la autoría de los crímenes del GAL y que se sentía como un "sacerdote" que no puede evitar que un inocente Rafael Vera, vaya a la cárcel. Añadió que nunca ha dicho nada porque nadie le ha preguntado, y dijo sentirse mal porque sólo van a la cárcel los ministros del PSOE.