El lendakari, Juan José Ibarretxe, anunció ayer su intención de abrir inmediatamente una ronda "discreta" de reuniones con todos los partidos políticos, incluida Batasuna, para avanzar en la "pacificación y normalización política" de Euskadi. También reiteró que en esta legislatura convocará el referendo que deberá ratificar el acuerdo que alcancen los partidos en esa mesa de diálogo.

En la apertura del curso político vasco, Ibarretxe prometió consagrar todas sus energías a lograr la paz y consideró "perfectamente posible" encontrar una fórmula "amable" de convivencia con España.

DOS VECES EN MADRID Ibarretxe aprovechó para anunciar que acudirá a Madrid al menos dos veces en las próximas semanas, para entrevistarse con el presidente José Luis Rodríguez Zapatero en una fecha aún sin concretar y para asistir a la cumbre de presidentes autonómicos del próximo día 10.

El lendakari defendió la necesidad de mantener encuentros entre todas las fuerzas con absoluta discreción para recuperar la "confianza" entre los partidos, por lo que se comprometió a no desvelar la agenda de reuniones y a no valorarlas. Tras defender que el País Vasco "no es una parte subordinada de España" --"seremos lo que nosotros queramos", insistió--, sostuvo que el "punto de partida" debe ser el reconocimiento de la existencia de un "conflicto político" que hay que resolver a través del diálogo.

Para acometer este proceso, el presidente vasco propugnó cinco principios: la ausencia de violencia, la no exclusión de ideas políticas, la igualdad de oportunidades para materializarlas, el principio "democrático" de la "consulta" popular y la "pluralidad" de sensibilidades nacionales que conviven en Euskadi, porque "nadie puede imponer ni impedir ningún sentimiento de identidad".

APOYOS PARA GOBERNAR Pese a asegurar que su objetivo primordial es buscar la paz, Ibarretxe también está obligado a hallar apoyos parlamentarios para gobernar, ya que está en minoría tras las últimas elecciones. Al respecto, manifestó su "intención y deseo" de pactar con distintos partidos según las materias, incluidos el Partido Comunista de las Tierras Vascas (EHAK) "e incluso con el PP". Sobre los socialistas, opinó que "sería bueno" que decidieran sus alianzas sin esperar a las municipales de 2007.

Las reacciones fueron inmediatas. Los socialistas anunciaron que participarán en la mesa de partidos, pero que no compartirán espacio con Batasuna hasta que condene la violencia. Joseba Permach, dirigente de Batasuna, dijo que no "admitirán" condiciones previas de PNV y PSE para el diálogo porque "no tienen ninguna legitimidad, ya que ellos también ejercen diferentes tipos de violencia".