Juan José Ibarretxe envió ayer un recado a la dirección del PNV al insistir en que hay razones "suficientes" para demandar a España ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo por el veto a la consulta. "No hay que tener miedo al fracaso", dijo en una indirecta alusión a las dificultades que sobre la viabilidad de la demanda ha esgrimido el líder del PNV, Iñigo Urkullu.

El lendakari lanzó este mensaje después de que él y los 10 consejeros de su Gobierno firmaran "a título personal" una adhesión al manifiesto acordado por los partidos PNV, EA, EB y Aralar en defensa de la consulta. Este documento se pactó la pasada semana y en él se afirma un propósito genérico de acudir a "foros europeos e internacionales" con iniciativas y demandas, pero no se recoge la denuncia contra España que el propio lendakari anunció el 1 de septiembre.

Aunque Ibarretxe aprovechó su comparecencia para alabar el trabajo de los partidos, su "inteligente" estrategia y su "importante" aportación política, lo cierto es que el forzado reconocimiento no ocultó sus reproches a quienes en la dirección de esas fuerzas dudan sobre la efectividad de la demanda.

SIN DIFICULTADES "No hay ninguna dificultad técnica", sentenció, obviando que algunas de las voces más escépticas provienen del PNV. Y es que frente a la opinión del portavoz en el Congreso, Josu Erkoreka, que duda del "recorrido" de la consulta, Ibarretxe está convencido de que el Constitucional "ha violado" el derecho de los vascos a opinar y que el Tribunal de Estrasburgo dará la razón a los partidos cuando recurran.

Ibarretxe confirmó que la sentencia del Constitucional no le apea de su defensa de una consulta que debería haber servido para "alumbrar" el camino de la paz. En su opinión, hubiera sido "letal para ETA" que los vascos se hubieran pronunciado en contra de la violencia.