ICV ha calificado este lunes de vergonzante la asistencia del presidente de la Generalitat, Artur Mas, a un acto "no neutral" y de "exaltación de un bando" como la beatificación del pasado domingo en Tarragona de 522 religiosos asesinados durante la guerra civil, y ha pedido la comparecencia en el Parlament de la vicepresidenta del Govern, Joana Ortega.

La portavoz ecosocialista, Laia Ortiz, ha denunciado que los miembros del Govern asistieran a un evento organizado por una institución como la Iglesia católica que "todavía no ha hecho autocrítica" sobre su papel durante el franquismo ni sobre su "silencio" e, incluso, "complicidad" con los fusilados durante la guerra civil y la posguerra.

"Creemos que el acto de ayer forma parte de la vergüenza acumulada, de la injusticia y de la desmemoria del país hacia las víctimas del franquismo", ha agregado Ortiz. La dirigente de ICV ha precisado que su partido defiende que los miembros del Govern no participen en actos religiosos, por lo que ha avanzado que su grupo parlamentario ha presentado una iniciativa parlamentaria para reclamar la laicidad de las instituciones catalanas.