La sociedad Aitzaga de Usurbil (Guipúzcoa) fue cerrada anoche, con enfrentamientos entre radicales y agentes de la Guardia Civil. Esta clausura podría ser la primera de una larga lista, ya que el juez de la Audiencia Nacional que ordenó el cierre, Fernando Grande-Marlaska, dispone de un amplio listado de sedes que dan infraestructura a la ilegalizada Batasuna.

Una veintena de agentes llegaron pasadas las siete de la tarde a esta herriko taberna (sede social de la izquierda aberzale). Estaban acompañados por otros seis agentes de paisano, y contaban con la cobertura de la Ertzaintza. Nada más aparecer, decenas de personas se sumaron a quienes montaban guardia en las inmediaciones. Las personas que estaban dentro del local fueron desalojadas entre gritos de "asesinos", "este no es el camino", "vosotros, fascistas, sois los terroristas" y "txakurras" (perros). El regreso de los agentes a sus vehículos fue tenso, ya que los radicales les insultaron, amenazaron y empujones, aunque no se utilizó material antidisturbios.

La clausura se había hecho esperar porque la Guardia Civil tenía dudas sobre las instalaciones que debía cerrar. Los agentes precintaron todos los locales relacionados con la herriko taberna .