Desde la tribuna del Congreso y en su turno de debate sobre la tercera prórroga del estado de alarma por el covid-19, Pablo Casado sacó un as de la manga. El presidente del PP esgrimió un informe del Institute of Certified Managment Accountants de Australia (ICMA) para cargar contra la gestión que de la crisis sanitaria del coronavirus estaba realizando el Ejecutivo de Pedro Sánchez. "¿Cómo es posible que un instituto australiano diga que somos el país que peor ha gestionado la respuesta al coronavirus si es algo simétrico y global?", se preguntaba Casado. El voxero Santiago Abascal seguiría esta misma senda minutos después.

Este documento consistía en un 'ranking' por estados en función de la respuesta global a enfermedades infecciosas (índice GRID), en el que España aparecía en el último lugar, en un artículo trufado con citas de prensa y sustentado en observatorios. Sin embargo, el informe final de esta investigación no está publicado, y su autor reconoce incluso a la Cadena Ser que está abierto a modificar las conclusiones, y que no ha seguido el caso español ni siquiera a través de la prensa.

El argumento empleado por Casado languidece cuando se enfrenta a los hechos. En primer lugar, este instituto no es un organismo ni científico ni académico, es "una empresa de gestión contable y financiera formada por una red de consultores". El autor del informe es uno de sus miembros: Christ D'Souza, un contable con 25 años de experiencia pero alejado de los laboratorios y de patrones epidemiológicos.

Consultado al respecto, D'Souza admite que su informe es de liderago, no de gestión sanitaria. También avanza que ni está publicado en web alguna ni lo estará, como tampoco será público el algoritmo utilizado. De hecho, según explica a eldiario.es, el artículo (publicado el 14 de abril) y esa tabla son los únicos contenidos disponibles "por ahora". El informe, que ha provocado polémica por situar a Sri Lanka en un sospechoso puesto nueve, se basa en un algoritmo que se actualiza permanentemente: de hecho, la posición de los países puede cambiar. Todos estos detalles dibujan muchas sombras sobre la herramienta utilizada por Casasdo y Abascal en su crítica a la respuesta sanitaria de Sánchez.

Visita a Mercamadrid

Este viernes, el líder popular ha visitado de madrugada Mercamadrid y allí ha solicitado a Sánchez que los trabajadores de sectores esenciales, como los 15.000 que acuden cada día a esta plataforma que garantiza la distribución y suministro de alimentos, cobren el salario bruto durante el estado de alarma porque se están "dejando la piel" en la crisis del coronavirus.

Casado, que ha acudido a Mercamadrid acompañado del alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, ha señalado que esas personas de sectores esenciales no tienen por qué pagar IRPF ni tampoco deben pagar sus empresas las cotizaciones sociales. "Es un alivio para ellos y no hay que poner ningún fondo sobre la mesa", ha añadido. "Son también esos héroes anónimos que están permitiendo que en España no nos falta lo básico", ha recalcado Casado, para insistir en que quería pedir al Ejecutivo "lo que merecen", de forma que cobren "su sueldo bruto durante el estado de alarma".