El Ministerio del Interior activará el 1 de julio la campaña verano 2008, en la que participarán más de 6.000 agentes, con el fin de blindar las áreas turísticas ante posibles acciones terroristas y el incremento de crímenes que se produce en zonas de afluencia masiva.

Fuentes de la lucha antiterrorista no dudan en afirmar que ETA intentará atentar, como otros veranos, contra intereses turísticos para tener eco internacional.