La Guardia Civil investiga la muerte en la provincia de Ciudad Real de un lince que recientemente fue introducido en la naturaleza en la zona de Guarrizar (Jaén), tras hallarse su collar identificativo en un vertedero de la localidad de Almagro.

Así lo han indicado a Efe fuentes de la Consejería de Agricultura de Castilla-La Mancha y el responsable del proyecto Life Lince en Andalucía, Miguel Ángel Simón, quien ha lamentado la pérdida que supondría esta muerte, de confirmarse, para el proyecto de recuperación de la especie.

Simón, en declaraciones a Efe, ha explicado que lo único que ha aparecido del lince, llamado Jazz, es el collar, hallado en una planta de residuos sólidos urbanos en la localidad de Almagro.

Fuentes cercanas al caso consultadas por Efe han asegurado que la hipótesis que manejan es que el ejemplar habría muerto en la zona natural de dispersión de la especie por causas desconocidas y que alguien decidió deshacerse del collar arrojándolo a un contenedor de basura.

Así, los restos habrían acabado en el vertedero de Almagro, municipio que podría estar alejado de la zona donde podría haber muerto.

Simón no ha querido manifestarse sobre cómo el collar identificativo de Jazz podía haber llegado a un vertedero público, pues, ha dicho, "es algo que se está investigando".

Los técnicos del programa trabajan ya en "descargar" toda la información que ha recogido el collar para ver si puede contribuir a arrogar luz a la investigación.

El responsable del proyecto Life Lince ha indicado que los últimos datos que los técnicos habían obtenido de este ejemplar lo situaban en la provincia de Ciudad Real en una zona de dispersión que es frecuentada por los ejemplares de la especie que son liberados o han criado en la zona de Guarrizar, que se encuentra entre los términos municipales de Vilches, Santa Elena y La Carolina, en la provincia de Jaén.

Simón ha apuntado que la pérdida de un ejemplar siempre es lamentable, pero se ha mostrado especialmente preocupado por las circunstancias que pueden haberse dado en este caso concreto.

Ha recordado que tras la reintroducción de linces para lograr en el futuro unas poblaciones más viables de este especie en peligro de extinción existe un trabajo previo muy importante de muchas personas que, ha comentado, "ahora se viene abajo por una circunstancia extraña".

Para Miguel Ángel Simón, lo más importante en estos momentos, además de lograr aclarar las causas de la pérdida de este lince, es seguir trabajando en lograr un fuerte apoyo social para la especie que lo deje libre de amenazas.

En cualquier caso, se ha mostrado optimista en cuanto al futuro de la especie y la consecución de los objetivos que persigue este proyecto.

El Life Lince se ha marcado como objetivo principal conseguir aumentar las poblaciones de lince ibérico de los 270 ejemplares censados en 2010 hasta los 450 individuos en el 2016.

Jazz, junto con Joaninha, fue uno de los dos linces liberados en la naturaleza el 21 de junio con el objeto de continuar con el programa de reintroducción de la especie.

Hijos de Castañuela y Fado y de Fruta y Fresco, ambos nacieron en 2012 en el centro de cría en cautividad del lince ibérico de Silves (Portugal).