El plan Ibarretxe divide a Izquierda Unida. Las dos federaciones más importantes en número de votos y militantes --Andalucía y Madrid-- exigen que se vote en contra del texto en el pleno Congreso. Su posición la comparten Navarra, Asturias, Extremadura y otras federaciones. Pero en Euskadi, Baleares y Valencia abogan por la abstención.

El coordinador general, Gaspar Llamazares, no logró ayer una posición común en la reunión de dirigentes regionales. En todo caso, dejó claro que IU no comparte ni apoya el plan.

Llamazares pospuso la decisión definitiva que dará Izquierda Unida a la reunión del consejo político de la formación, prevista para el día 22 y que, en primer lugar, confirmará o revocará su elección como coordinador general.