Hace tan solo dos años, la izquierda aberzale celebró el Aberri Eguna en plena euforia de una tregua con posibilidades de darle el mayor protagonismo político imaginado. Ahora, sin embargo, pasa por sus peores momentos. Con los dirigentes más reconocibles encarcelados y dos partidos en trámites de ilegalización, ni siquiera dispone de una sigla que le pueda representar con claridad en el agitado mapa político vasco.

Aunque el Partido Comunista de las Tierras Vascas sea todavía la voz de la izquierda aberzale en la Cámara vasca, este grupo nunca ha ejercido un liderazgo en el conglomerado radical. Tampoco ANV podrá continuar a partir de ahora ejerciendo desde los ayuntamientos tareas de dirección política.

Uno de los portavoces de Batasuna en el País Vasco francés, Xabi Larralde, comparecía la pasada semana para anunciar el comienzo de una nueva etapa y asegurar que los resultados electorales de la abstención demuestran todavía su "capacidad política" y su incidencia social.

La cita de hoy en Irún les servirá para mostrar que disponen de militancia fiel capaz de movilizarse en las peores circunstancias y de plantar cara a lo que llaman "estado de excepción".