El portavoz de la cadena de televisión Al Jazira, Yihad Ballout, denunció ayer en El Cairo (Egipto) que la detención de su corresponsal Taysir Alyoni "es un nuevo atropello del que son víctimas los periodistas en general y los de Al Jazira en particular", y pidió el apoyo de organizaciones de defensa de los derechos humanos.
Al Jazira nombró ayer un abogado para la defensa de Alyoni, detenido el viernes en su casa de Alfacar (Granada) por orden del juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón, por su presunta vinculación con la red Al Qaeda, que lidera Osama bin Laden.
Desde Ammán (Jordania), Taleb Jairalah, el cirujano iraquí que el pasado abril operó del corazón a Alyoni en Bagdad (Irak) durante los bombardeos estadounidenses, denunció que éste podría fallecer en cualquier momento si se ve expuesto a presiones. "Su salud cardiaca es inestable y podría morir si se ve expuesto a presiones de índole física o mental", advirtió. Jairalah, que reside en Ammán, intervino quirúrgicamente al periodista de Al Jazira para colocarle tres stens en el corazón tras sufrir una obstrucción coronaria.
REACCIONES EN ESPAÑA
La Asociación de la Prensa de Granada se interesó ayer por la situación de Alyoni y mostró su "absoluto respeto" al ordenamiento del Estado de derecho. Alyoni estaba montando una corresponsalía de la cadena Al Jazira en Madrid.
