El expresidente del Parlamento vasco Juan María Atutxa (PNV) y los miembros de la Mesa de esa Cámara Gorka Knörr (EA) y Kontxi Bilbao (EB) han sido absueltos del delito de desobediencia al Tribunal Supremo por no disolver al grupo parlamentario de Batasuna. El Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) ha considerado que los tres actuaron bajo inviolabilidad parlamentaria al defender la autonomía de la Cámara.

La sentencia ni siquiera entra a valorar las decisiones adoptadas por los tres imputados, que dieron lugar a un enfrentamiento institucional, inédito por su intensidad, entre un órgano legislativo y el Supremo. En la resolución divulgada ayer, los jueces argumentan que, una vez acreditado que los imputados actuaron "gozando del privilegio de la inmunidad", la sala del Tribunal Superior Vasco carece de "jurisdicción" para enjuiciar si hubo o no conducta delictiva. El sindicato Manos Limpias confirmó que recurrirá la sentencia ante el Supremo.

El fallo, que firman los magistrados Pablo Sesma, Javier Murgoitio y Juan Carlos Iturri, se fundamenta en el Estatuto de Autonomía, cuyo artículo 26 señala que los miembros del Parlamento "serán inviolables, por los votos y opiniones que emitan en el ejercicio de su cargo".

Los jueces recuerdan que el Constitucional ha dictado sentencias en las que deja claro que el funcionamiento democrático de las cámaras "impone el libre debate y el contraste de pareceres en absoluta libertad". También precisan que los tres tomaron sus decisiones como miembros de la Mesa de la Cámara, y para preservar la "autonomía" de ésta. Añade que tales decisiones no fueron producto de la "invención o propio colecto de los imputados", sino que estuvieron informadas previamente por los servicios jurídicos de la Cámara.

La portavoz del Gobierno vasco, Miren Azkarate, confirmó la "alegría" del Ejecutivo al haberse reconocido la inocencia de quienes "defendieron con dignidad" una institución de Euskadi.