Diez denuncias por homenajes a etarras que iban a ser archivadas han cobrado vida tras los recibimientos (ongietorris) dados a los etarras Xabier Ugarte y José Javier Zabaleta, Baldo, a finales de julio. El Gobierno ha pedido a la fiscalía investigar si se cometió enaltecimiento del terrorismo. Si el nuevo criterio prospera, los 10 casos, denunciados por la asociación de víctimas Covite y pendientes de resolución de la Audiencia Nacional, supondrían el procesamiento de etarras excarcelados y algunos líderes aberzales.
En los tres últimos años, ya sin ETA en activo, la Audiencia Nacional archivó nueve denuncias contra homenajes a terroristas. El argumento fue que al no existir ETA, no había riesgo para las personas y que eran «manifestaciones de alegría». Ahora, la Delegación del Gobierno en el País Vasco entiende que son actos «inaceptables» y que puede haber «humillación a las víctimas».
La fiscalía de la Audiencia Nacional tiene pendiente pronunciarse sobre el homenaje a los etarras Iñaki Igerategi e Ignacio Otaño en Andoain, ambos condenados a seis años de prisión por dar a ETA información para asesinar a Joseba Pagazaurtundúa. A su salida en libertad, fueron agasajados por «más de doscientas personas, niños incluidos», según la denuncia de Covite. Como en cada ongi etorri, reservado solo a los etarras no arrepentidos, hubo un pasillo de honor, entrega de ramos de flores y el baile de un aurresku.
El cambio de criterio de la fiscalía puede afectar también a un líder político. Una de las denuncias es contra Arkaitz Rodríguez, secretario general de Sortu, partido integrado en Bildu. Rodríguez participó en el homenaje al etarra Argala -implicado en el atentado contra Carrero Blanco-, celebrado en diciembre del 2018 en Arrigorriaga (Vizcaya).
RECURSOS EN MARCHA / El cambio de criterio puede afectar también a dos denuncias que habían sido archivadas pero están recurridas. Una es la del homenaje, en agosto del 2018 en Bilbao, a Joseba Enbeitia, condenado por facilitar información para asesinar al ertzaina Joseba Goikoetxea. La otra es el ongi etorri a Kepa Etxeberria, condenado por asesinato frustrado y recibido «entre vítores y pancartas» en Renteria (Guipúzcoa), ese mismo año. Según la denuncia que investiga la Audiencia Nacional, montó el homenaje el grupo Kalera Kalera, vinculado a Sortu, que organiza los agasajos a presos excarcelados que no han pedido perdón.
Al frente de Kalera Kalera está José Antonio López, Kubati, asesino de Yoyes, la dirigente de ETA arrepentida. Kubati fue condenado a 1.200 años por ese y otros 12 asesinatos, y otros 16 en grado de tentativa, pero cumplió 26 y salió en libertad en el 2013. Ahora forma parte de la comisión de presos de Sortu.
EL ASESINO DE HIPERCOR / Rafael Caride Simón, uno de los autores materiales del atentado más sangriento de la historia de ETA, el que asesinó a 21 personas e hirió a otras 45 en el centro comercial Hipercor de la avenida Meridiana de Barcelona, quedó ayer definitivamente en libertad. «Vengo a firmar los papeles y ya no vuelvo más. No voy a hablar» fueron sus únicas palabras, al diario El País, a la salida de la cárcel guipuzcoana de Martutene, la prisión en la que liquidó una condena de 790 años por haber colocado el coche bomba en los sótanos del supermercado aquel viernes 19 de junio de 1987. De 74 años y natural de Vigo, Caride Simón ha pasado 26 años entre rejas, 19 en España y otros siete en Francia.
