Los problemas económicos asedian a Julián Muñoz. Tras conocerse el embargo del dinero obtenido por unas entrevistas en televisión, el Tribunal de Cuentas le ha condenado, junto con otras dos personas, a devolver al Ayuntamiento de Marbella más de 50 millones de euros desviados desde una sociedad municipal que administraron entre 1993 y el 2003. El consistorio está buscando "todos los bienes embargables" de los imputados para recuperar los fondos.

La sentencia señala que mientras formaron parte del consejo de administración de Contratas 2000, Muñoz, el exedil Esteban Guzmán y el abogado Modesto Perodia cometieron varias irregularidades contables que acarrearon a las arcas locales pérdidas por casi 35 millones de euros. Los acusados tendrán que devolver esta cantidad más los intereses, unos 15 millones.

Las anomalías consistieron en el pago de 11,6 millones de euros por obras no realizadas, así como la entrega de más de 23 millones de euros a empresas vinculadas con el arquitecto Carlos Monteverde --implicado en el caso Saqueo II -- por proyectos de obras sin ejecutar o que fueron copiados de obras en otros municipios y justificadas "mediante meros recibos". En su defensa, Muñoz y los otros dos implicados alegaron que sus cargos eran formales y que no participaban en la gestión de la empresa. No obstante, el Tribunal de Cuentas, que da por prescritas las irregularidades contables anteriores a 1997, considera que su conducta puede calificarse de "gravemente negligente".

Tras este nuevo revés judicial, el exalcalde de Marbella tiene aún pendientes un centenar de casos relacionados con delitos urbanísticos, malversación o blanqueo. Entre ellos, los casos Saqueo II, Malaya, la pieza separada --en la que está implicado con la cantante Isabel Pantoja y Maite Zaldívar-- y las 47 causas por concesión de licencias, agrupadas como delito continuado en un pacto con la fiscalía.