El diálogo entre periodista y dirigente político de Junts per Catalunya (JxCat) tiene lugar en el Parlament. Pregunta: «¿Cómo afectará a la unidad estratégica independentista vuestra posible discrepancia en el sentido del voto respecto a la investidura de Pedro Sánchez?». Respuesta: «Por unidad estratégica no me viene nada».

La anécdota es reveladora del estado más que gélido de las relaciones entre posconvergentes y ERC, esta vez a cuenta de la posible divergencia en la decisión sobre Sánchez en el Congreso. Como afirmaba un representante de JxCat, «no afectará a nuestras relaciones porque ya no queda nada por romper». Pero sí queda mucho por reprocharse mutuamente.

Los fieles a Puigdemont y los partidarios del no a Sánchez desde el primer minuto afean en privado a Esquerra que el tono del discurso de Gabriel Rufián el martes fuera mucho más templado incluso que el del PNV, a su juicio. Un discurso, añaden, que era acorde a una abstención, que al final no se produjo. Y lo dibujan como un portavoz abocado a apoyar al PSOE porque tiene pánico a una repetición electoral.

El portavoz de JxCat en el Parlament, Albert Batet, tuiteó que el concurso de ERC no es necesario en la votación de hoy porque con el apoyo del PNV y Podemos, Sánchez obtendría la mayoría simple que necesita (más votos a favor que en contra). La obtendría, si ERC votara en contra, gracias también a la suspensión de los diputados independentistas presos. Es decir, que el mensaje de Batet es el de que ERC, con su abstención «solo sería útil para tapar que Sánchez es presidente gracias a la represión». Otro ataque que demuestra la profunda división entre las dos fuerzas es el del diputado Francesc de Dalmases, en Twitter, que afirmó: «Investir a Pedro Sánchez y no haberse atrevido a investir al president Puigdemont no pasará, ¿verdad?».

Un ataque directo a Esquerra, que responde afirmando que JxCat está obsesionada con ellos. Los republicanos en privado recuerdan que la posición de los posconvergentes no es ni ha sido unánime internamente, dado que algunos diputados sí eran partidarios de la abstención, mientras que el president Torra, diputados afines al mismo en el Parlament, y el expresident Puigdemont están por el no. Respecto a Puigdemont, recuerdan que tampoco era favorable a la moción de censura contra Mariano Rajoy. En cualquier caso, en ERC mantienen que actuarán bajo su propio criterio con independencia de JxCat.

PETICIÓN DE TORRA A PODEMOS / Las negociaciones sobre la investidura de Pedro Sánchez entre el PSOE y Podemos se colaron ayer en la sesión de control del Parlament. El presidente de la Generalitat, Quim Torra, pidió a los comuns que defiendan la autodeterminación de Cataluña en las conversaciones con el aspirante a presidente del Gobierno. «Les ruego que no renuncien a uno de los grandes consensos en Cataluña, el ejercicio del derecho de autodeterminación. No dejen a Cataluña de lado», dijo Torra.