El coordinador federal de IU, Cayo Lara, ha hecho hoy un llamamiento al resto de fuerzas políticas y sociales -a "los que consideran negativa las políticas de ajuste y recortes" del Gobierno del PP- para lograr una gran movilización unitaria en otoño.

En rueda de prensa, Lara ha explicado que ésta será una de las líneas estratégicas "a corto y medio plazo" de Izquierda Unida y del grupo parlamentario de la Izquierda Plural, además de diseñar la estrategia para las elecciones europeas del año próximo y de continuar con su política de oposición al Gobierno.

Lara ha insistido en que todo el Ejecutivo debe dimitir, empezando por su presidente, Mariano Rajoy, ya que incumple su programa electoral y ha ganado las elecciones de forma fraudulenta, debido a que el PP lleva supuestamente "más de 20 años" financiándose de forma ilegal.

Respecto a la movilización, ha señalado que IU no quiere "ningún tipo de protagonismo" y que de lo que se trata es de que han detectado que hay "muchas movilizaciones atomizadas" y por diversos "hechos puntuales" cuando el problema, "las políticas neoliberales del PP", afecta a todos.

Por ello, ha continuado, "hay que trabajar" con todo el tejido social, "como las 'mareas', el 15M o los sindicatos" y, a partir de ahí, aglutinar a los descontentos "para hacer la mayor de las movilizaciones posibles".

Lara ha indicado que aún no hay fecha, ya que ésta deberá surgir de las reuniones que mantengan con el resto de implicados y ha sugerido que también podría servir para pedir la dimisión de Rajoy.

El coordinador de IU, que también ha mostrado su rechazo a los Presupuestos de 2014, porque el techo de gasto fijado "anuncia más recortes", se ha opuesto a la "especie de intervención" que el FMI propone para España, como el recorte del 10% de los salarios, abaratamiento del despido, descuelgue de los convenios, subida del IVA o reducción de las cotizaciones a la Seguridad Social de los empresarios.

Sobre las elecciones europeas, ha indicado que IU mantiene conversaciones con varias organizaciones políticas y que ya ha llegado a acuerdos con formaciones como ICV, CHA o Batzarre, con los que debate un programa anticapitalista.

Respecto al conflicto de Gibraltar, Lara ha considerado que en agosto el Gobierno "ha pretendido lanzar una cortina de humo" con este asunto "para ocultar los problemas reales" y hacer olvidar también la comparecencia de Rajoy en el Senado para explicar el caso Bárcenas, así como las comparecencias judiciales de tres secretarios generales del PP.

Tras insistir en que Rajoy no dijo la verdad al no reconocer que el extesorero continuó hasta hace poco en el PP, se ha mostrado perplejo por que esos secretarios generales no conocieran la situación de las cuentas del partido.

En cuanto a que el exgerente Cristóbal Páez haya cobrado también una indemnización complementaria, ha asegurado que forma parte del "mismo juego" y que el PP "tiene que callar bocas y ésta es otra boca", y ha reiterado que fue en la dirección del partido donde "se ha cocido la trama de corrupción".

Lara ha precisado que IU seguirá pidiendo explicaciones, a pesar del "calendario de huida" de Rajoy de septiembre, en referencia a sus viajes internacionales, "para evitar su comparecencia" en el Parlamento, y ha recordado que su grupo ha pedido un pleno extraordinario para que el presidente explique su relación con Bárcenas.

Además, en la Diputación Permanente de mañana la Izquierda Plural solicitará las comparecencias de los ministros de Justicia, Defensa, Sanidad, Fomento, Exteriores, Economía e Interior, si bien Cayo Lara no ha sido muy optimista a que se autoricen.

Sobre la situación en Cataluña, Lara ha recordado que IU defiende el derecho a decidir, pero también el Estado federal y ha animado a practicar políticas que ayuden a convivir.

A su juicio, tanto la política del Gobierno central como la de Artur Mas deberían ayudar a confluir en vez de a diverger, porque eso es lo que quieren los ciudadanos.

Ha recordado que CiU apoya el derecho a decidir, pero también al PP, porque "no ha habido medidas neoliberales que no haya aprobado" y sus consecuencias, como el aumento del paro, los recortes en sanidad o educación o la reforma laboral también lo sufren los catalanes y eso es "lo que hay que desenmascarar".