El Ayuntamiento de Lekeitio (Vizcaya) ha condenado hoy el "infierno" que decenas de encapuchados han hecho vivir anoche a los vecinos de este pueblo, que celebra estos días sus fiestas patronales, según consta en un comunicado difundido por el consistorio. Durante la madrugada se han registrado en este municipio de la costa vizcaína numerosos incidentes y disturbios, que se saldaron con ocho personas detenidas y siete heridas, entre ellas un agente de la Ertzaintza.

En el comunicado del ayuntamiento, que tiene mayoría del PNV y no cuenta con presencia de la izquierda abertzale, se destaca que los violentos "pusieron en grave riesgo" a los lekeitianos y ocasionaron "innumerables destrozos, con el consiguiente gasto que eso supone para las arcas municipales". "No tuvieron ningún escrúpulo -se destaca en la nota- en poner en peligro a personas y bienes del pueblo al que dicen defender pero que, en realidad, desprecian y utilizan para esconderse cobardemente y conseguir sus fines".

Esta localidad, según el comunicado, vivió nueve incendios en cinco horas y múltiples destrozos, además de las agresiones físicas y el acoso que sufrieron algunas personas que transitaban por la calle. Lo ocurrido anoche, según el ayuntamiento, se enmarca en el "calentamiento global" que ha sufrido Euskadi durante todo el verano, con los municipios "convertidos en epicentros y escenarios donde echar un pulso para medir las fuerzas y a los ciudadanos convertidos en víctimas del horror".

El consistorio pide que se esclarezcan los hechos y apunta como "motivo de reflexión" que no se había registrado una "batalla campal semejante" desde el franquismo. También se pone a disposición de todos los vecinos para prestarles ayuda y la asesoría técnica y administrativa que necesiten para reclamar daños.