La versión española de la serie televisiva CSI en que se ha visto inmerso el diputado de IU, Gaspar Llamazares, le brindó ayer la oportunidad de sacar pecho ante los que tildan de demagógico su clásico discurso contra el "imperialismo" de EEUU. Un hilo argumental que ha utilizado en numerosos debates en el Congreso para criticar la guerra de Irak y de Afganistán y que, según dijo ayer, podría estar detrás de la utilización por parte del FBI de una foto suya en internet para confeccionar un retrato robot actual de Osama bin Laden.

"No creo que haya sido un error casual vinculado a una búsqueda aleatoria de imágenes en internet. No me parezco en nada a Bin Laden", aseguró Llamazares en una multitudinaria rueda de prensa. "Conocían mi nombre, ya que para que salga la foto se tiene que teclear en el buscador", añadió.

Una teoría con la que cimentó la acusación de que el FBI manipuló su imagen por "prejuicios y sectarismo ideológico", lo que le convierte en una víctima de la "guerra preventiva en auge" que tantas veces ha criticado.

Para justificar esta versión el diputado recordó que la policía federal estadounidense también ha reconocido que utilizó rasgos de su rostro para componer el retrato de otro terrorista, el sirio Aityah Abd Al Rahman. Y eso le llevó a preguntarse por la existencia en los ficheros del FBI de políticos de partidos de izquierda de EEUU y Europa.

Llamazares, que reconoció sentirse preocupado por su seguridad, en especial si algún día recala en un aeropuerto estadounidense, exigió una investigación "a fondo" en la que se depuren responsabilidades, tal y como solicitó el lunes la Comisión de Exteriores del Congreso.

El eurodiputado de IU, Willy Meyer, denunció lo sucedido ante la Comisión y el Consejo Europeo, a los que reclamó el envío de una protesta formal al Gobierno de Barack Obama. Meyer calificó el montaje fotográfico de "alarmante incidente".