El coordinador general de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, ha asegurado este jueves que su partido no votará a favor de la independencia de Cataluña en el caso de que el presidente de la Generalitat, Artur Mas, lleve a las Cortes su plan para que esa región se separe de España.

"Nosotros respetamos la capacidad de decisión de los pueblos y en concreto del pueblo catalán, pero al mismo tiempo tenemos muy claro que queremos convivir dentro de una España plural y plurinacional", ha explicado en una entrevista en TVE recogida por Europa Press. "Mi horizonte no es la separación, es que sigamos conviviendo juntos de otra manera", ha añadido.

"No estamos a favor de la independencia. No votaremos la independencia, votaremos el federalismo y votaremos la convivencia en España", ha afirmado Llamazares, que ha apostado por actuar con "naturalidad" y aceptar con "normalidad democrática" la futura celebración de la consulta de autodeterminación.

En este sentido, ha rechazado la actitud que adoptaron "algunos" en relación con el Estatuto de Autonomía, que "hicieron de la confrontación la única política", y ha pedido tanto a los partidos nacionalistas catalanes como "al conjunto de las fuerzas políticas españolas" que hagan "autocrítica".

A su juicio, la "deriva independentista" que se ha producido en Cataluña es "consecuencia" de esa confrontación y de "la negación de la nación catalana por parte del Tribunal Constitucional".

Recurrir la legalidad solo en último término

El coordinador general de IU cree que "la voluntad popular no se puede parar" y que, por lo tanto, la consulta se va a celebrar. En este contexto, ha señalado que "la Constitución se puede cambiar" porque no son "las tablas de la ley".

"Se equivocan aquellos que quieren únicamente una solución legal a un problema político" que debe tener "una solución política", es decir, "una negociación que permita recomponer la relación entre Cataluña y España", ha opinado.

Llamazares considera que "solamente" se debería recurrir a la legalidad "en último extremo" y que lo que debe hacer el Gobierno central es abrir un "diálogo" con Cataluña. En este sentido, ha criticado el "portazo" del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y también la decisión de Mas y del portavoz del Grupo Catalán en el Congreso de los Diputados, Josep Antoni Duran i Lleida, de "lanzarse directamente a una deriva independentista".