"No sirve para nada". Así de tajantemente ha descrito el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, el acuerdo de investidura al que llegaron este martes el PSOE y Ciudadanos, un pacto que ambos partidos formalizarán este miércoles en el Congreso de los Diputados. En una entrevista en Antena 3, Rajoy ha subrayado la evidente falta de apoyos para sacar adelante la investidura de la suma de los 90 diputados socialistas y los 40 del partido naranja, después de que Podemos ratificara que votará que 'no' a esta fórmula (ERC y Democràcia i Llibertat también se opondrían).

"No es ni un pacto de investidura ni un pacto de gobierno", ha afirmado, al tiempo que ha destacado también que ese acuerdo tampoco permitiría hacer la reforma constitucional que proponeAlbert Rivera (se necesitarían necesariamente los votos del PP, ya que debería de aprobarse con el refrendo de tres cuartas partes de los diputados).

Asimismo, el líder de los conservadores ha mostrado su asombro por el "entusiasmo" del presidente de Ciudadanos para apoyar a los socialistas. "Ya ha tomado partido, nombraron presidente del Parlamento a Patxi López y ahora van a apoyar a Pedro Sánchez como presidente del Gobierno", ha recalcado.

LOS PROBLEMAS DE ESPAÑA

Sobre los detalles que se han conocido del pacto entre PSOE y C's, Rajoy ha considerado que no se centran en los "verdaderos problemas" de los españoles. "No hablan de empleo, decompetitvidad, de qué vamos a hacer para mantener larecuperación económica, de las pensiones, de la sanidad, definanciación pública, de lucha contra el terrorismo o de launidad de España", ha asegurado antes de zanjar: "Es poco serio".

Igualmente, se ha mostrado en contra de la supresión de las diputaciones porque supondría "dejar en situación muy complicada a la gente que vive en pueblos pequeños". Rajoy, que fue presidente de la Diputación de Pontevedra, ha asegurado que son las administraciones más saneadas y que la distribución del territorio en comarcas sería "mucho más caro" y supondría aumentar la "duplicidad de servicios". Respecto de los aforamientos, sí que se ha mostrado dispuesto a hablar y a eliminar los que sean prescindibles.

El presidente del Gobierno central ha insistido en que mantiene su propuesta para configurar un gobierno liderado por el PP "con algún tipo de entendimiento con PSOE y Ciudadanos". Y ha asegurado que si Sánchez no logra ser investido, él intentará conseguir los apoyos necesarios para presentarse a la investidura, aunque ha admitido que podría no lograrlo y se tendría que ir a elecciones.

Por último, Rajoy se ha mostrado totalmente en contra de que se elija a un presidente independiente para liderar el Gobierno. A su juicio, es un "disparate" porque este presidente no contaría con el apoyo de los ciudadanos, sino de las "élites".