Ojo por ojo, diente por diente. El candidato de CiU a la presidencia de la Generalitat catalana, Artur Mas, advirtió ayer al presidenciable del PSC, Pasqual Maragall, de que aplicará la ley del talión cada vez que los socialistas acusen al Gobierno catalán y a la federación de prácticas irregulares. Dicho y hecho. Mas afirmó que el líder del PSC "pertenece a una generación de socialistas" que en 1996 abandonaron el Gobierno central "con el rabo entre las piernas, acusados y condenados por gravísimos casos de corrupción".

Con esta andanada, Mas replicaba al líder de los socialistas catalanes, quien la víspera había anunciado ante los cuadros de su partido que, si gana las elecciones, acabará con la "corrupción y el amiguismo" en la Generalitat. La respuesta del conseller en cap se produjo en el marco del consejo nacional de Converg¨ncia Democr tica, que tuvo un acentuado tono electoral.