La ley de la memoria histórica tendrá un espacio destacado entre las 4.000 enmiendas parciales a las cuentas para el 2010, presentadas por todos los grupos, que se debatirán en la comisión parlamentaria de presupuestos entre hoy y el jueves. El desarrollo reglamentario de la norma, en vigor desde diciembre del 2007, ha deparado algunas sorpresas desagradables a los familiares de las víctimas del franquismo por las restricciones en el pago de las indemnizaciones. Una situación que algunos afectados dejarán de sufrir por una enmienda presentada por el PSOE a su propio proyecto.

La iniciativa modifica el artículo de la ley que reconoce y amplía derechos y establece medidas a favor de quienes padecieron persecución o violencia en la guerra civil y la dictadura.

Hasta ahora, se distinguían dos grupos de beneficiarios, el preferente (hijos, cónyuges y convivientes) y otros subsidiarios (padres, nietos, hermanos e hijos de la persona conviviente). Pero mientras los primeros podían acceder a ese derecho sin condiciones, a los del segundo grupo se les imponía que dependieran económicamente del fallecido en el momento que ocurrieron los hechos. Este requisito desaparecerá con carácter retroactivo.

Este cambio significará un aumento de la partida económica para este fin, lo que justifica que la enmienda se presente al proyecto de presupuestos.