El secretario general de CDC, Artur Mas, reelegido ayer en el 13º congreso de Converg¨ncia Democr tica (CDC) con el 96,3% de los votos, destacó ayer la "unidad y cohesión" del partido y llamó a la militancia a que evite caer en un "nacionalismo de salón" y baje a la calle en busca de "nuevas adhesiones".

En la clausura del encuentro, Mas emplazó a los cuadros y bases de CDC a "huir del conformismo" y practicar un "nacionalismo de calle", saliendo de sus despachos y bajando a hablar con la gente para "convencer a aquellos que no están convencidos de nuestro proyecto".

"A veces nos perdemos en disquisiciones más dirigidas a nosotros mismos, cayendo en la autocomplacencia y olvidando que nuestra tarea es ir a convencer a otros", afirmó Mas, refrendado ayer por los delegados en el congreso con 1.468 votos a favor, 40 en contra y 16 en blanco.

El secretario general salió reforzado de un congreso que se presumía "difícil", dados los recientes reveses electorales de CiU, pero que finalmente avaló el nuevo organigrama convergente. Mas, que consiguió salir reelegido con un apoyo 11 puntos superior al que obtuvo en el congreso del 2000, destacó que del cónclave sale un partido "unido, cohesionado y motivado", que "no estará pendiente de lamerse las heridas".

Pese a la renovación de los cargos directivos de CDC aprobada en el cónclave, Mas dijo que defenderá las "paredes maestras" del proyecto convergente y no permitirá que la línea del partido y, por extensión, de CiU, "se salga de nuestro camino". De hecho, reafirmó que los dos ejes básicos de su discurso seguirán siendo "nación y progreso".

APOYO A LA CONSTITUCION Además, CDC celebrará un congreso extraordinario a principios del 2005 para decidir si apoya o no la Constitución Europea en el referendo que, a tal efecto, convocará el Gobierno español. La decisión se adoptó el sábado in extremis después de que un grupo de delegados al 13º congreso del partido lograra la aprobación de una enmienda que mandaba a CDC pedir el voto negativo y hacer campaña en contra de la Constitución de la UE si, como sucede, no reconoce el catalán como lengua oficial.