Los dos neurólogos del Hospital Vall d'Hebron de Barcelona imputados por la muerte de una paciente que falleció de un derrame cerebral tras recorrer cuatro hospitales han desvinculado hoy el caso de los recortes en sanidad y del cierre de quirófanos en dicho centro sanitario.

Según fuentes judiciales, ambos médicos han declarado hoy como imputados ante la titular del juzgado de instrucción número 9 de Barcelona, que investiga la querella que presentó la familia de una vecina de Girona que murió de un aneurisma en septiembre de 2011 tras deambular durante 65 horas por el Hospital de Blanes, Josep Trueta de Girona, Vall d'Hebron y Clínic de Barcelona.

La paciente falleció en el Hospital Clínic de Barcelona, adonde había sido derivada desde la Vall d'Hebron para practicarle una embolización porque, según la versión de este centro sanitario, dispone de recursos técnicos más adecuados y cuenta con los mejores especialistas.

Los imputados han apoyado hoy la versión del hospital, que siempre desvinculó el caso de los recortes, y han negado que la paciente permaneciera ingresada en el centro durante horas sin ser operada debido al cierre de quirófanos en Vall d'Hebron a raíz de los ajustes presupuestarios.

Según el relato de los médicos, la mujer permaneció ingresada durante horas para practicársele las pruebas necesarias para diagnosticar su estado y no fue intervenida quirúrgicamente antes porque se estaba a la espera de valorar su situación, dado que se trataba de una operación compleja.

La paciente, de 65 años, fue desviada desde el Hospital Josep Trueta de Girona al de la Vall d'Hebron porque este es el centro de referencia que establece el mapa sanitario para patologías agudas, como un aneurisma.

Sin embargo, los imputados han señalado que el hecho de ser centro de referencia para ese tipo de dolencias no implicaba una sobrecarga de trabajo para el Hospital Vall d'Hebron, han añadido las mismas fuentes.

Según la versión de los médicos, los recortes presupuestarios no han afectado al área de neurocirugía del Hospital Vall d'Hebron y, además, los facultativos de esa sección han llegado a trabajar horas extras sin remuneración.

La querella, interpuesta por el abogado Rafael Núñez no imputa una negligencia médica a los responsables del hospital, sino que, en una iniciativa pionera, persigue un fallo sanitario por el delito del artículo 542 del Código Penal, que castiga a los funcionarios o cargos públicos el ejercicio de derechos civiles reconocidos en la Constitución y las Leyes.