Efectivos israelíes de operaciones en Naplusa hirieron al menos a 8 palestinos y arrestaron a 30 residentes, informaron hoy fuentes de la seguridad en esa ciudad del norte de Cisjordania ocupada.

El presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abás, condenó la operación israelí por medio de un comunicado oficial en el que dice que se trata de "una agresión inaudita" y "un acto de sabotaje" contra los acuerdos de La Meca, que sentaron las bases para un gobierno de unidad nacional entre los islamistas de Hamas y los nacionalistas de Al Fatah, que el lidera.

También resultaron heridos dos soldados israelíes cuando militantes palestinos les arrojaron cargas explosivas, informaron fuentes militares. Los soldados -que comenzaron la operación en la noche del viernes al sábado- fueron atacados con bloques de cemento, bombas incendiarias y otros artefactos cuando efectivos del cuerpo de infantería del regimiento Golani, blindados e ingeniería llegaron hoy al centro de la ciudad.

Según fuentes palestinas, los soldados entraron a Naplusa con más de 100 vehículos entre jeeps, carros blindados y excavadoras, y por medio de altavoces instaron a los residentes a informar sobre el paradero de seis milicianos buscados de las Brigadas de los Mártires de Al Aksa, afiliadas al movimiento nacionalista Al Fatah.

Toque de queda El Ejército impuso el toque de queda a unos 50.000 vecinos en el centro y en la "casbah", el casco antiguo de la ciudad, para buscarlos casa por casa mientras estaban paralizadas las actividades y cercados los dos hospitales de la localidad.

Las tropas israelíes, según fuentes palestinas, bloquearon los accesos a Naplusa por medio de obstáculos de cemento armado y también estaban cerradas la Universidad de Al Najah y las escuelas. Según informaciones de fuentes palestinas no confirmadas por el Ejército israelí, los militares han logrado meterse en la onda de emisión de la radio palestina para llamar a los militantes buscados a que depongan las armas y se entreguen.

Según un portavoz militar israelí, hasta el momento los efectivos que participan en la operación descubrieron al menos diez artefactos explosivos y ayer un laboratorio de dinamita y armas.

Se supone que las excavadoras pueden ser empleadas en caso de que milicianos palestinos se atrincheren en la ciudad. Las operaciones se intensificaron hoy después de un paro general y una manifestación promovidos por islamistas de Hamás y nacionalistas de Al Fatah para exigir que las fuerzas de seguridad de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) pongan fin a la anarquía y restablezcan el imperio de la ley contra diversas milicias.

Un portavoz militar israelí informó esta mañana de que uno de los objetivos de la operación es también buscar laboratorios de explosivos que operan clandestinamente en Naplusa.

Según testigos, las tropas israelíes cuentan con el apoyo de la Fuerza Aérea y, por primera vez en los últimos años, el Ejército ha puesto bloques de cemento armado para impedir la entrada a Naplusa, a unos 70 kilómetros al norte de Jerusalén.