El dirigente de UPN Miguel Sanz se ha puesto hoy a disposición de la presidenta del Parlamento de Navarra por si ésta estimara oportuno proponer su candidatura a la investidura como presidente del Gobierno, al tiempo que se mostró optimista con respecto a la consecución de un acuerdo con el PSN. Sanz, que abrió la tercera ronda de consultas con la socialista Elena Torres, explicó al término de la entrevista en conferencia de prensa que no tiene inconveniente en presentarse "si hay garantías de sacar más votos a favor que en contra" y por lo tanto dejó abierta la puerta hasta que el final de las consultas con todos los grupos parlamentarios para conocer estas posibilidades.

Adelantó en todo caso que tras la ruptura de las negociaciones entre PSN, NaBai e IU ya ha mantenido una primera conversación con el socialista Fernando Puras y "me da la impresión -dijo- de que está en una actitud favorable para alcanzar un acuerdo con UPN" bien para un gobierno de coalición o bien para un gobierno de los regionalistas en minoría con algún acuerdo firmado que garantice la estabilidad institucional.

Confirmó además que Fernando Puras "no contempla la hipótesis de una moción de censura" transcurridos unos meses desde que Sanz pueda acceder al Gobierno y en todo caso adelantó que "no estoy dispuesto a que me pongan una navaja de Albacete sobre el cuello". "Y además -comentó- todavía tengo el ánimo para comprender la buena voluntad de los demás y he creído entenderla en las palabras de Puras".

Miguel Sanz si que reiteró que la consecución de un acuerdo tendría que producirse en un breve tiempo para no dilatar más esta situación y evitar así que Navarra sea el "vaivén de las opiniones nacionales y objeto de tertulia preferente". De hecho aseguró que si hoy Elena Torres le propusiera como candidato y en tres días se celebrara el pleno de investidura "de tres días me sobran dos para conseguir un acuerdo".

Sanz se refirió también a las críticas recibidas por NaBai tras la ruptura de las negociaciones de esta coalición con el PSN para indicar que entendía que se puedan sentir "desairados" con los socialistas pero "llamarnos sectarios y cavernícolas a UPN dice mucho de sus planteamientos radicales" cuando a su juicio su partido ha mantenido el "máximo respeto" al proceso negociador habido.

"Nosotros siempre hemos dicho que con NaBai no vamos ni a heredar, porque discrepamos en el modelo político, en el modelo institucional de Navarra, algo sustancial", pero esto, dijo, es una opinión legítima que a su juicio no merece los reproches recibidos.